Rosa Gisela Olivis de Gray: Conoce el vino ruso

Actualmente un creciente número de los vinos rusos comienzan a ser de excelente calidad, producidos con uva y técnica importada de Francia.

Abrau-Durso el llamado “Champagne para el pueblo”

Rusia siempre ha sido asociada al vodka, ha logrado mantener una moderna industria vinícola, todo una gran revelación. Actualmente un creciente número de los vinos rusos comienzan a ser de excelente calidad, producidos con uva importada de Francia, además de las tecnologías vinícolas.

El vodka es la bebida típica rusa

Rusia produce vino en climas más cálidos de las regiones de Krasnodar y Rostov, junto al Mar Negro, producen vinos en la actualidad de la calidad de los europeos. Rosa Gisela Olivis de Gray  señala que es interesante conocer que el cultivo de la vid al sur de Rusia, Georgia y Armenia situadas en el fértil clima mediterráneo del sur del Cáucaso, precede incluso a la Antigua Grecia, industria que comenzó a finales del siglo XIX, cuando el zar Alejandro II y los nobles de la corte importaron las técnicas francesas de producción de vino.

El auge del vino seco sucedió cuando se formó el gusto ruso por los vinos semidulces y espumosos, después de haber sido el séptimo país en producción de vino. Se incentivó nuevamente el gusto por el vino bajo el mandato de Stalin, quien concientiza que el vino debía ser asequible para todos los ciudadanos soviéticos.

Un vino exquisito resultado de la solución creativa resultado de unos vinos poco aceptables debido a su alta acidez y falta de sabor, a los que se adicionó glucosa y alcohol etílico, practicas de la industria vinícola de Rusia. En la actualidad han emergido bodegas de buena calidad, como la de Abrau-Durso cerca del puerto de Novorossiisk en el Mar Negro, o Chateau le Grand Vostock.

Rusia es el país más extenso del mundo

Rosa Gisela Olivis de Gray comenta que este es un vino espumoso muy apreciado como aperitivo gracias a la buena acidez que tiene y por acompañar el risotto de hongo, el pulpo, la pasta con camarones, las codornices en salsa de frutas rojas, el pollo en curry amarillo, la trucha rellena de frutos del mar, además el queso brie y el de cabra con frutos secos miel de abeja. 

Una solución creativa, una donación al pueblo que se convierte en el icono de una nación.

Por Rosa Gisela Olivis de Gray